Después de recibir el correo de mi profesor de economía e investigar sobre los kibbutz, me di cuenta que el proyecto planteado sonbre una economía de autobastecimiento agrícola para los sectores marginados del país no funcionaría ya que estas personas, ya están erradicadas en la ciudad, tienen ahí su pequeño hogar y no tienen el territorio suficiente para realizar su huerta. Es por esto que esta economía de autoabastecimiento requeriría un traslado de estas personas de la ciudad a una zona rural; y sería muy difícil hacer que todas las personas lo acepten y que el gobierno encuentre todo el territorio que necesita y que le invierta la cantidad de dinero que es necesario invertirle.
Además, este proyecto tomaría demasiado tiempo, y estas personas que viven el día a día no están para esperar que crezca una zanahoria.
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